Los minerales de conflicto
En áreas políticamente inestables (RDC, CAHRA), los grupos armados a menudo usan trabajo forzoso para extraer minerales. Después venden esos minerales para financiar sus actividades, por ejemplo, para comprar armas. Los denominados “minerales de conflicto”, como el estaño, el tantalio, el tungsteno y el oro, pueden llegar a nuestros teléfonos móviles, automóviles y joyas.
Control minucioso de los proveedores
La organización federal estadounidense Security and Exchange Commission y el Parlamento Europeo y el Consejo han emitido directrices claras para las empresas con respecto a la obligación de aportar pruebas de que las materias primas utilizadas son libres de conflictos. Dichas directrices se aplican a toda la cadena de suministro. CERATIZIT se asoció con otros actores de la industria del tungsteno para crear el grupo de trabajo TI-CMC (Tungsten Industry Conflict Minerals Council). El grupo desarrolló un procedimiento estandarizado que le permite comprobar la conformidad de los trabajos de fundición con las directrices. La auditoría de gestión de la diligencia debida de la cadena de suministro de minerales conflictivos de CERATIZIT se ha incluido en el programa de auditoría ISO 9001 de la sede.
Socios comerciales seleccionados
El TI-CMC coopera con organizaciones de otros sectores, como la RMI (Responsible Minerals Initiative), con el fin de cubrir otros minerales además del tungsteno, como el cobalto, el tántalo, el estaño y el oro. Esta colaboración ha permitido establecer una lista de empresas de confianza que cumplen todos los requisitos estipulados en las directrices. CERATIZIT establece relaciones comerciales con miembros de la RMI que ya han sido identificados como empresas que realizan trabajos de fundición “sin conflictos” o que están en proceso de homologación.